DETALLES

Sabemos qué es el sarro en las personas, pero ¿cómo es en nuestras mascotas?

Una de las visitas frecuentes a l@s veterinari@s supone el hecho de que a nuestro animal le huele mucho el aliento, sufre de halitosis; y a veces le damos la razón al propietario sin ni siquiera llegar a explorar la boca del animal, le huele a distancia. Pero, el sarro es sólo una parte de este problema. Hay que recordar también que el mal aliento de los perros puede deberse a varias razones de salud.

En un inicio se produce con la formación de placa dental-bacteriana, a la cual se agregan restos de la comida que se va descomponiendo y bacterias, conformando un depósito de mineralización, duro y pardo. Se acumula gradualmente en superficies rugosas, sobre todo entre los dientes y debajo de la encía, provocando que esta última se enrojezca, inflame y se retraiga poco a poco, lo que se le conoce como gingivitis; además se reabsorbe el hueso del diente, debilitando la unión del diente a la mandíbula, lo cual a medio plazo ocasiona la pérdida de piezas dentales. A la enfermedad provocada por el sarro, materia orgánica, gingivitis, etcétera, se le da el nombre de enfermedad periodontal, que es el verdadero problema del asunto.

¿Es muy frecuente que los perros o gatos tengan sarro?

Más de lo que pensamos. Alrededor de 3 de cada 5 perros estaría afectados en distintos grados por el sarro y las enfermedades bucodentales que le acompaña. La tasa alcanzaría el 80 % en perros de más de 5 años. En gatos disminuye algo la incidencia.

¿Existen algunos factores que favorecen más la aparición del sarro en unos animales u otros?

La dieta, por ejemplo, es uno de los factores que más inciden en la aparición del sarro, ya que la alimentación blanda, casera o en lata, predisponen a que queden restos entre los dientes que según se descompongan iniciarán o agravarán la aparición del sarro.

Mala higiene. O falta de higiene. Sólo hay que pensar cómo tendríamos nosotros la boca si no nos cepilláramos los dientes nunca.

La raza. Las razas pequeñas tienden a presentar más el problema por diversos factores como la acidez de la saliva, dientes más pequeños  y juntos, a veces dispuestos unos sobre otros, o en varias filas, que predisponen que el alimento se acumule; además que los perros pequeños sean los que muy a menudo recibe alimento casero.

En cuanto a la edad, durante mucho tiempo se creyó que la enfermedad periodontal provenía de la rotura de los tejidos de sostén a causa del envejecimiento, pero actualmente sabemos que esto no es así. La enfermedad periodontal es infecciosa, puede afectar a perros jóvenes de hasta 3 años de edad.

¿Se puede tratar la enfermedad periodontal?

Si. Aunque debe ser nuestr@ veterinari@ quien evalúe el estado de la infección, para poner las pautas. En algunas ocasiones requiere antibioterapia específica previa a una limpieza dental. Esta limpieza dental se realiza bajo anestesia general o tranquilización, y de ahí, el poco convencimiento de algunos propietarios a realizarlo. Pero es imprescindible, ya que es un tratamiento molesto para el animal, igual que cuando nos lo hacen a nosotros, y el no hacerlo así sería peligroso para el animal y ¡para el/la veterinari@! Se realiza, exactamente como a nosotr@s nuestr@ dentista, con ultrasonidos, con el conseguimos un raspado de la superficie de los dientes y bajo ellos, eliminando así el sarro y la placa dental, y después el pulido de los mismos.

¿Es verdad que la limpieza de dientes en los perros provoca que se caigan?

Una limpieza dental a veces se acompaña de algunas extracciones dentarias y ésta es la causa del rumor insistente de que esta práctica es responsable de la caída de los dientes del paciente. En realidad, el/la veterinari@ lo que hace es extraer los dientes que están a punto de caer pues se ha producido una retracción de la encía a causa del sarro acumulado y aparecen, digámoslo así para que nos entiendan, como descarnados, en algunas ocasiones vemos incluso la raíz del diente. Y el sarro no sostiene al diente, sin embargo, las bacterias presentes en el mismo (se dice que alrededor de 10 millones en cada miligramo del mismo) provocan esa reacción inflamatoria de la encía destruyéndola progresivamente y atacando en profundidad, debajo de ella, los elementos que sostienen los dientes, como el ligamento alveolo-dental y al hueso alveolar.

¿Qué edad debe tener un perro para someterse a una limpieza?

No hay una edad definida para la aparición del sarro. La limpieza dental debe realizarse en cuanto se detecta la acumulación  del mismo para prevenir la periodontitis.

¿Es cierta la creencia de que los huesos mantienen en buen estado los dientes de nuestras mascotas?

Pues no es cierta. Ese símbolo indisociable del hueso y el perro, viene de muchísimo tiempo cuando los perros en la convivencia con las personas se alimentaban de lo que nos sobraba en la mesa, y ¿qué es lo que sobra que no nos comemos?, pues en gran medida los huesos de las presas. Pero ya hoy en día están desacreditados como alimentos o como complementos alimenticios, y lejos del beneficio de prevención del sarro por el hecho de que la masticación de elementos sólidos permite un cepillado mecánico de los dientes, algunos huesos por sus esquirlas constituyen un riesgo ya que pueden herir la mucosa bucal, además de poder perforar u obstruir  el intestino de nuestras mascotas.

Consejos que podemos dar para prevenir el sarro

Bueno, es muy parecido al cuidado de nuestros dientes; un cepillado regular, una buena dieta y revisiones regulares con nuestr@ veterinari@. El cepillado será más fácil si empieza a hacerlo cuando el perro es todavía joven, aunque el perro de cualquier edad al final se acostumbrará a ello. No tenga prisa para que su perro se acostumbre a que le cepillen los dientes, empiece con mucha confianza para calmarlo. Déjele probar un poco de pasta de dientes luego masajee suavemente sus dientes para que se acostumbre a la sensación. Al principio es posible que no le guste pero tenga paciencia, al final lo logrará. Cepille con movimientos regulares prestando especial atención al lugar donde se encuentran el diente y la encía. Luego, cuando ya casi haya acabado, cepille verticalmente hacia el interior de su boca para limpiar la placa que haya movido.

Deberíamos cepillar los dientes de nuestros perros al menos una vez a la semana aunque lo mejor es hacerlo una vez al día. Como alternativas al cepillado existen comidas, tipos y formas de la croqueta de pienso y golosinas para perros especialmente formuladas para reducir el sarro y prevenir la aparición de la enfermedad periodontal. Es la manera más sencilla de asegurar que su perro recibe alguna forma de "cepillado" cada día. Hable con su veterinario para ver si hay algún alimento o método concreto que él o ella prefiera. En todo caso, recuerde que mantener los dientes de su perro en buen estado es esencial para su salud en general.

¿Pueden usarse cepillos y pasta de dientes para personas en el cepillado de dientes de nuestros animales?

No utilice la pasta de dientes formulada para personas, tienen un alto contenido en flúor que puede ser tóxico para nuestras mascotas. Hay pastas formuladas especialmente para mascotas que son más seguras y su sabor les gustará mucho más.  Y dependiendo del tamaño de los dientes y de la boca de su perro posiblemente pueda usar un cepillo de dientes normal que no sea duro ya que resultan demasiado abrasivos. Sin embargo, existen cepillos diseñados especialmente para tal fin, que se adaptan en forma y tipo de cerdas a la anatomía de sus bocas, o que se ponen en un dedo para facilitar el cepillado. Pregunte a su veterinari@ qué le recomienda.